Creo haber tomado una decisión, otra de esas que te hacen tambalear,
de las que te hacen sentir miedo a la vez que ilusión, incertidumbre a la vez
que certeza.
Una de esas en las que el apoyo y consejo de los que más
quieres es imprescindible, de las que tardas semanas, incluso meses en tomar,
de las que estudias a fondo y barajas todas las posibilidades, los pros y los
contras, las probabilidades de acertar o de fallar.
Quizás le demos demasiada importancia; sin que nos demos
cuenta, se trata únicamente de una serie de factores, situaciones que de alguna
manera se alinean en el espacio tiempo y que indican que es la hora, que ese
momento ha llegado, el de cerrar y abrir una nueva etapa.
Que eso que pensabas tan lejano hace unos años, cuando
llegaste, está ya aquí. y que otro pistoletazo de salida está a punto de sonar.
Aún quedan unos meses, pero ya creo vislumbrar la línea de
meta y a solo escasos metros, otra nueva, intacta aún, pero con todo a punto para comenzar a
correr de nuevo.